LA PAZ, 11 de julio.— El embajador de Bolivia ante la
Organización de Naciones Unidas (ONU), Pablo Solón, pidió
formalmente a la entidad internacional declarar el acceso al agua
como un derecho humano irrevocable, destaca hoy la prensa nacional.
La estatal Agencia Boliviana de Información reproduce la misiva
enviada por el diplomático al ente mundial, en la cual recuerda que
en estos momentos un borrador es sometido a análisis para su
posterior presentación al titular del organismo, refiere PL.
Se trata de la primera ocasión en que se le ha solicitado a la
Asamblea General tratar el tema del agua y el saneamiento limpio y
seguro, el cual no figura en la Declaración Universal de Derechos
Humanos de 1948.
El hecho de que el agua no sea un derecho humano ha permitido que
las decisiones políticas al respecto se pasen de la ONU a
instituciones que no responden a los estados miembros, y no se
adhieren a sus normas, añade.
La propuesta boliviana aparece en la carta de motivos de la
Conferencia Mundial de Pueblos y Derechos de la Madre Tierra,
celebrada en abril último en la ciudad de Cochabamba.
De acuerdo con los datos ofrecidos por el Embajador, la falta de
acceso al agua potable y servicios de saneamiento provoca la muerte
de un niño cada ocho segundos, la más alta tasa de letalidad de las
patologías en el planeta.