Cuba desarrolla con éxitos la cirugía de prótesis peneana, un
acto que no es imprescindible para la vida, pero sí revela los
avances de la salud pública y el esfuerzo por elevar la calidad de
vida de los hombres.
Según el doctor Ramiro Fragas, presidente del Grupo Nacional de
Sexología y miembro de la Junta Directiva Nacional de Urología,
mientras en el país caribeño la operación no cuesta nada, en las
naciones capitalistas los pacientes tienen que desembolsar más de 10
mil dólares.
El especialista, también jefe de servicios médicos del hospital
Manuel Fajardo, de La Habana, significó a la AIN que este programa
se ha extendido a casi todas las provincias, entre las cuales
destacan Holguín, Matanzas, Camagüey y Las Tunas.
La implantación de prótesis peneana se acomete en última
instancia, cuando el paciente presenta una disfunción eréctil severa
y luego de agotarse los tratamientos medicamentosos, agregó Fraga
tras concluir en la ciudad de Las Tunas una jornada científica con
la asistencia de urólogos de nueve territorios.
El acto quirúrgico, de una hora de duración aproximadamente,
consiste en colocar dentro del tejido del pene, un aditamento que
estimula la erección.
Añadió el doctor Fragas que este procedimiento se viabiliza en
pacientes que descuidan la diabetes mellitus o la hipertensión
arterial, así como también en adictos al consumo de cigarrillos y
bebidas alcohólicas.
Tales dolencias y adicciones son las causas de que en Cuba el 50
por ciento de los hombres con edades entre los 40 y 70 años padezcan
de disfunción eréctil en sus distintos grados, puntualizó.
Aclaró que el padecimiento no sólo afecta la erección del órgano,
porque paralelamente puede complicarse con la diabetes mellitus,
enfermedades cerebro vasculares o cardiopatía isquémica.
Cuando el hombre acude al médico acotó- es porque las arterias
del pene (de pequeño calibre) son las primeras en transmitir el
aviso.
Por ello reiteró- el tratamiento a estas personas, primeramente
está basado en el cambio de hábitos de vida, luego de ser remitidas
al endocrinólogo o cardiólogo para que le controlen la enfermedad
que provocó la falta o poca erección.
El especialista expresó que más del 90 por ciento de los hombres
con prótesis peneana se han sentido satisfechos con la cirugía, pero
advirtió que con ello no todo el problema está resuelto, pues si no
se atiende la afección que la originó su estado de salud puede
complicarse.