Aunque todavía distan bastante de la demanda, las cifras indican
ya un despegue significativo. "El año pasado entregamos 105 000
prendas a las tiendas recaudadoras de divisa de varias cadenas, y en
el 2010 esperamos hacer tres veces esa cantidad", afirma Jorge Luis
Dueñas, director de la Empresa ALBA, la principal entidad dedicada a
las confecciones en Pinar del Río, con siete talleres ubicados en
varios municipios del territorio y un total de 14 marcas
reconocidas.
Unida a un fuerte encargo estatal, en el que se incluyen los
uniformes escolares de todas las enseñanzas destinados a Vueltabajo,
la Isla de la Juventud y parte de Ciudad de La Habana, este
constituye un volumen de producción inédito en la industria.
"Este salto ha sido posible gracias a la revitalización de la
actividad, con la incorporación de más de 350 equipos, entre ellos
unas 300 máquinas de coser, además del acondicionamiento de los
talleres", comenta Jorge Luis.
Las labores se iniciaron en el 2007 y desde entonces los ingresos
de la entidad han aumentado a un ritmo de un millón de pesos
anuales.
Pero la estrategia de potenciar las industrias locales posee
otras virtudes: "El costo de producción de nuestras prendas es
inferior al de las importadas y constituye una importante fuente de
empleo", destaca el directivo.
Por ello, a fin de incrementar la entrega, en algunas de sus
instalaciones se apuesta por el doble turno de trabajo. "Ya se está
aplicando en el taller de Santa Lucía y en el transcurso del año
pretendemos hacerlo también en el de Consolación del Sur" asegura.
Sin embargo, el tema de la calidad, un problema habitual en buena
parte de las producciones nacionales abre la interrogante de si este
aumento de la oferta tendrá el respaldo de los consumidores.
El director de la Empresa ALBA, considera que sí: "Nuestros
especialistas realizan los estudios de mercado y tenemos diseñadores
propios.
"La respuesta siempre ha sido positiva. Incluso en el 2008, la
marca Eva obtuvo el premio de calidad en la Feria Internacional de
La Habana", añade.
Siguiendo el mismo principio inviolable de no descuidar los
diseños, para el 2010 está aprobada una colección de 19 modelos de
shorts, bermudas y pantalones de mezclilla, tanto para mujeres como
para hombres.
Bajo marcas como GNU, Eva, Monteros, EAH o Bisonte, las
confecciones hoy ganan terreno en las tiendas, donde ponen en
evidencia la peligrosa costumbre de depender de la importación de
productos que se pueden obtener acá.