GINEBRA, 23 de
junio.— Estados Unidos volvió a ser emplazado en el Órgano de
Solución de Diferencias (OSD) de la Organización Mundial de Comercio
(OMC) por transgredir principios elementales de la actividad
comercial y permitir la usurpación de marcas contra Cuba.
Durante la reunión, la representación cubana y otros países
denunciaron enérgicamente la ilegal y amoral Sección 211, que viola
las reglas de respeto a la propiedad intelectual.
Para no variar, los delegados de Washington presentaron su
escueto informe de situación, el número 91, en el que reiteraron que
el gobierno de ese país trabaja con el Congreso para dar
cumplimiento a las recomendaciones del OSD.
Con la exigencia de que Estados Unidos adopte medidas urgentes
para resolver este viejo diferendo, elevaron la palabra, además, la
Unión Europea, Ecuador, Chile, Brasil, China, Venezuela, México,
India y Vietnam.
En todos los casos se renovó la demanda de que Washington cumpla
de una vez sus obligaciones, respete el principio de pronto
cumplimiento y derogue la Sección 211, vigente desde 1998.
El consejero de la Misión Permanente de Cuba, Fidel Ortega,
refirió que Estados Unidos no ha explicado qué supuestos esfuerzos
ha realizado para cumplir lo acordado, e instó al país a brindar
detalles.
Ortega subrayó que con esa actitud se pone en entredicho el
sistema, y anotó que uno de los países más interesados en el
funcionamiento de las reglas de propiedad intelectual hace caso
omiso a las decisiones adoptadas por el OSD.
El trasfondo del diferendo se concentra en el uso de la marca de
ron Havana Club por la firma Bacardí, descalificado por la OMC sin
una respuesta o acción positiva del gobierno norteamericano para
cumplir la exigencia de la comunidad internacional.