Mayo
advierte lo mucho que puede dispararse el consumo de electricidad en
esta provincia en los meses de verano, si no se cumplen con urgencia
las medidas encaminadas al ahorro de ese portador energético.
Informes emitidos por la Organización Básica Eléctrica (OBE)
atestiguan que durante los primeros 29 días de este mes el
territorio consumió 32 633 MWh, es decir, 1 690 MWh por encima de lo
planificado para ese periodo.
Esos resultados exceden en 5,5% al consumo previsto y ponen fin
al favorable comportamiento seguido por la provincia en los primeros
cuatro meses del año, en que el plan acumulado se comportó al 99,4%.
De hecho, el incumplimiento en el mes que hoy concluye incide,
por su holgura, en que también se quebrante el plan acumulado en lo
que va de año.
Especialistas de la OBE atribuyen el sobreconsumo de mayo al
aumento de la temperatura en unos tres grados centígrados durante el
mes, lo que generó mayor uso de equipos eléctricos como ventiladores
y aires acondicionados.
Mayo, empero, prácticamente inicia el periodo de verano. Por eso
hay que andar rápido en el cumplimiento de las medidas de ahorro
previstas y de otras provenientes de las iniciativas de los
colectivos laborales y del sector residencial.
Los meses siguientes se caracterizan por temperaturas mayores y
las vacaciones de miles de estudiantes y trabajadores, las que
generan mayor consumo eléctrico en los hogares.
Es justamente el sector residencial (gasta el 61% de la energía
asignada a Guantánamo) el máximo responsable del exceso en el
consumo, por las causas mencionadas, el derroche y otras como la no
generalización (aunque se avanza) del uso de los dispositivos de
barro para las hornillas eléctricas, que a decir de los
especialistas ahorran el 16% del gasto de corriente.
Otras fuentes de ahorro están en la continuidad del trabajo para
la detección de los fraudes eléctricos en el sector residencial (se
han descubierto más de 400) y en la reducción de las pérdidas de
energía, indicador en que la provincia exhibe el 13%.