El IX Encuentro Iberoamericano de Género y Comunicación comenzará mañana en esta capital y se extenderá hasta el viernes, para analizar el impacto de la crisis mundial en la mujer y el tratamiento de su imagen en los medios.

Periodistas, investigadores y expertos de Venezuela, México, Colombia, España y Francia se unirán a los 35 delegados cubanos que representarán a órganos de prensa nacionales y locales, además de universidades y otras instituciones.

Una mirada hacia la problemática femenina por ser las mujeres las que más sufren a consecuencia de las crisis económicas, del deterioro del medio ambiente y las sequías, dará pie a un panel este miércoles, tras la inauguración del evento en el hemiciclo del gobierno de La Habana Vieja.

También el primer día habrá presentación de los libros "50 voces y rostros de líderes campesinas", de Yohanka Valdés y Yuliel Cruz, y "Por andar vestida de hombre" y "Gallegas en Cuba", ambos de Julio César González y en formato digital.

El trabajo en comisiones será los días 27 y 28 y se debatirá sobre las nuevas alternativas al discurso sexista contra la violencia, desde la perspectiva de los países participantes.

Para Cuba, esta cita tiene como antecedentes las palabras del Presidente Raúl Castro, cuando en la más reciente sesión de la Asamblea Nacional de Poder Popular llamó a potenciar el papel de las féminas en cargos de dirección.

Con 18 años de existencia, los encuentros iberoamericanos de Género y Comunicación ganan en profundidad y calidad, gracias al esfuerzo sostenido de sus organizadores: la Unión de Periodistas de Cuba, la Federación de Mujeres Cubanas y la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales.

El evento es convocado cada dos años para intercambiar con estudiosos del género y analizar el protagonismo social de la mujer en la región, y así propiciar un mayor acercamiento a su realidad.

Las 35 ponencias se refieren a productos comunicativos, al tratamiento en los medios de temas como el VIH SIDA, los derechos sexuales y reproductivos, las buenas prácticas de un periodismo no sexista y la imagen de la mujer, entre otros.