La doctora María Eufemia Padrón Pereira, directora del Centro,
explica que hoy tienen la más alta cifra de oftalmólogos en la
historia de la provincia. Solo en la institución que ella dirige
existen 31 para atender las diferentes subespecialidades.
"Los pacientes disponen —afirma— de avanzados procedimientos
terapéuticos. Los que mayor impacto han tenido son el trasplante de
córnea, la cirugía refractiva con excímer láser, la de catarata con
el empleo de la técnica de facoemulsificación (mínimo acceso con la
implantación del lente intraocular); el HRT o ultrasonido del nervio
óptico, que ayuda al diagnóstico del glaucoma, enfermedad que puede
ocasionar ceguera irreversible."
Fundador de la Misión Milagro en el 2004 y médico
internacionalista con una larga trayectoria en la especialidad, el
doctor Carlos Alberto Pérez Padilla, oftalmólogo pediatra, asegura
que la entidad asistencial posee un equipamiento muy moderno,
incluso similar al de los países del llamado Primer Mundo.
"Esta institución causó gran impacto social. Anteriormente muchos
de los enfermos estaban obligados a trasladarse a Camagüey o a
Ciudad de La Habana. A lo anterior se suma la actividad docente,
pues contribuye a la formación de nuevos especialistas.
También permite el estudio de la morbilidad de algunas afecciones
oculares. Una de las aristas del trabajo investigativo actual, por
ejemplo, está encaminada a la aplicación de un programa para evitar
la ambliopía (disminución de la visión de los niños sin causa
aparente) en las escuelas primarias de Ciego de Ávila.
La doctora Karinne Peña Hernández es la primera neuroftalmóloga
de la provincia. "Mi especialidad es una de las más clínicas entre
todas las relacionadas con la Oftalmología. Sin que constituya una
definición presuntuosa, muchos la catalogan como la sacerdotisa que
estudia el ojo humano. En el nervio óptico, por ejemplo, es donde se
produce la información que llega al cerebro".
Una primera mirada bastó para que la doctora Inés Esteban Armas,
especialista en cirugía refractiva con excímer láser, lanzara la
frase: "En tu ojo izquierdo se está desarrollando un pterigium".
Y luego me hizo fruncir el ceño: "Después de los 40 llega la
presbicia". Ante mis dudas explicó: "Es cuando la visión disminuye
de cerca".
Lo que hacemos hoy —prosigue—, anteriormente era un sueño, tanto
que el mismo día de la inauguración hicimos las primeras ocho
intervenciones con láser y hoy vamos por más de 400. Esta cirugía
elimina el uso de espejuelos y de lentes de contacto —afirma una de
las especialistas que, desde el Centro Oftalmológico de Ciego y de
manera gratuita, devuelve calidad de vida a quienes la precisen.