Argentina celebró este martes el bicentenario de la revolución de mayo con una actividad político-cultural en la capitalina galería Zurab Tsereteli, donde enfatizó las premisas para su desarrollo y las relaciones con Rusia, reporta Prensa Latina.

La celebración incluye a todos los actores sociales y políticos y a todas las regiones de nuestra nación, pues el bicentenario pertenece a cada uno de los argentinos, declaró el encargado de Negocios de Argentina en este país, José María Veneres.

En este marco, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kichner, ha propuesto que la conmemoración del bicentenario se desarrolle en torno a tres aspectos, declaró el diplomático.

Primero, un país independiente y soberano, a través de la tecnología, la ciencia y la innovación; segundo, la necesidad de promover la construcción de un país participativo y federal; y tercero, la profundización de la pertenencia latinoamericana, apuntó.

La fortaleza de un país reside en forjar un sentimiento nacional que sea compartido por todos sus habitantes, consideró.

Precisamente, la celebración del bicentenario de la revolución de mayo de 1810 refleja la unidad territorial, la identidad cultural y una visión de futuro de Argentina, afirmó.

Ello ocurre en el contexto regional, en una atmósfera de convergencia histórica y cultural con los países del resto de América Latina, explicó ante el cuerpo diplomático acreditado en Rusia.

Respecto a los vínculos con Rusia, consideró que estos se encuentran en el mejor momento, como lo demuestran las relaciones económicas y culturales actuales.

Además, en octubre de este año celebramos el 125 aniversario del establecimiento de nexos diplomáticos entre ambos países, recordó.

El viceministro ruso del Exterior Serguei Riabkov afirmó que el proceso de establecimiento de un estado independiente argentino en los dos últimos siglos se convirtió en un aporte importante para la civilización latinoamericana y la cultura mundial, consideró.

En su mensaje a Argentina por el bicentenario, el mandatario ruso, Dmitri Medvedev, expone lo que une a los dos países y dentro de las tres prioridades del desarrollo argentino, dos coinciden con las de Rusia: la innovación y la necesidad de un mundo multipolar, subrayó.