LIMA, 18 mayo.— Organizaciones indígenas amazónicas rechazaron
hoy la oferta gubernamental 25 nuevas zonas de filiación
petrolífera, en su mayoría ubicados en la selva, para su exploración
y explotación por transnacionales.
La Asociación Interétnica de la Selva Peruana (Aidesep) calificó
como un atentado a los pueblos nativos el concurso, anunciado la
semana pasada por la empresa estatal de negociaciones petroleras (Perúpetro),
dijo PL.
Un pronunciamiento de Aidesep fustigó en particular al presidente
ed Perúpetro, Daniel Saba, quien informó que la licitación será
promovida desde hoy en Estados Unidos, Francia, Inglaterra y
Colombia.
Según Saba, las empresas que ganen los lotes ofrecidos tendrán
que hacer una inversión inicial de mil 250 millones de dólares para
explorarlos en busca de gas y petróleo.
El presidente de la Organización de Estudiantes Indígenas de la
Amazonía Peruana, Wagner Acho, dijo que la licitación forma parte de
un proceso de entrega del territorio selvático a las
transnacionales.
Llamó a las organizaciones regionales y populares de la región
nororiental de Loreto a enfrentar el problema, porque en corto
tiempo toda la a Amazonía estará en manos de intereses extranjeros.
Según Acho, las poblaciones amazónicas de Yurimaguas, Ucayali y
Madre de Dios alistan paros generales para rechazar la licitación
convocada por el gobierno, mientras el Frente Patriótico de Loreto
realizará esta semana una asamblea para analizar el tema.
La reacción de los indígenas puso en cuestión las declaraciones
de Saba, en el sentido que la licitación fue consultada a las
comunidades indígenas sin que hayan puesto objeciones.
La política gubernamental de entregar concesiones mineras y
petroleras sin la conformidad de las poblaciones afectadas genera
con frecuencia conflictos sociales según la Defensoría del Pueblo.
El Congreso debate una ley de consulta para esos casos, reclamada
por los nativos, que no están conformes con los proyectos tratados
en el parlamento porque no establece la obligatoriedad de contar con
la anuencia de los lugareños antes de cualquier decisión que los
afecte.
La demanda indígena fue el principal ingrediente de una vasta
protesta registrada en 2009 y que registró hace casi un año 34
policías y civiles muertos.