Científicos estadounidenses señalaron que parte del petróleo
vertido en el Golfo de México tras la explosión de una plataforma el
pasado 20 de abril, podría llegar a los cayos de la Florida en unos
pocos días, reporta Prensa Latina.
Los modelos matemáticos indican que el crudo podría ser atrapado
por la corriente principal del Golfo, conocida como la "corriente
rizo", resaltaron.
Si la marea negra llega a la zona afectaría el Santuario Nacional
de los Cayos de Florida, donde se encuentra el tercer arrecife más
grande del mundo, los manglares costeros y el parque nacional de los
Everglades, agregaron.
Por otro lado, se conoció que unas 150 tortugas fueron
encontradas muertas o moribundas a lo largo de la costa del Golfo de
México, un número que los investigadores medioambientales consideran
muy elevado para la época del año.
Aún cuando en los cadáveres no se determinaron signos de
contaminación por crudo, su cercanía al lugar del desastre hace
pensar que si tenga relación.
La víspera, especialistas del Instituto Nacional de Ciencia y
Tecnología Submarina subrayaron que la fuga de crudo podría ser
entre 25 mil y 80 mil barriles diarios, y no de cinco mil como se ha
informado.
Asimismo indicaron la presencia de grandes columnas de petróleo
bajo la superficie del mar, las que estarían acabando con todo el
oxígeno a su alrededor.
Una de esas acumulaciones tiene una extensión de 16 kilómetros de
largo por cinco de ancho, y debió originarse por los productos
químicos utilizados por la compañía British Petroleum (BP) para
dispersar la sustancia, manifestaron.
Desde que ocurrió el desastre los expertos buscan alternativas
para contener la fuga de petróleo y detener el avance de la mancha
de crudo.