Más de un centenar de costarricenses marcharon hasta el lugar donde se celebraba la ceremonia de investidura de la presidenta Laura Chinchilla para expresar su rechazo a la continuidad de programas emprendidos por el anterior gobierno, reporta Prensa Latina.

Efectivos antimotines impidieron el acceso de los manifestantes al Parque Metropolitano La Sabana, donde Chinchilla asumió la presidencia para el período 2010-2014.

Según declaró a la prensa el secretario general de la Asociación de Profesores de la Enseñanza Secundaria, Carlos Hernández, el objetivo de la marcha es demandar de la flamante mandataria dar marcha atrás a proyectos iniciados por su antecesor, Oscar Arias.

En particular rechazan la minería a cielo abierto, así como los planes de privatizar el Instituto de Electricidad, el agua y los puertos del Caribe.