SANTIAGO DE CUBA.— El miembro del Buró Político Esteban Lazo
Hernández, vicepresidente del Consejo de Estado, convocó a
multiplicar experiencias que favorezcan la producción de alimentos y
contribuyan a reducir los elevados gastos para adquirirlos en el
mercado internacional. A su juicio, este es el principal reto
sociopolítico de los cubanos para garantizar la invulnerabilidad de
una Revolución, que es ejemplo de preocupación y entrega a su
pueblo.
En la Cooperativa de Producción Agropecuaria Abel Santamaría,
Lazo comprobó la efectividad de la estrategia comercial para evitar
la pérdida de frutas en las montañas santiagueras, que en etapas
anteriores llegó a rebasar el 50 % del total de la cosecha.
Este año la CPA Abel Santamaría, con sobresalientes resultados en
la ganadería cubana, aportará 500 toneladas de pulpa de mango,
zapote, anón, tamarindo, caimito, guayaba, níspero y otras frutas
que demanda la industria láctea para la producción de helados,
empeño en el que se entremezclan la sustitución de importaciones y
un considerable ahorro de leche en polvo.
El recorrido del Vicepresidente incluyó un complejo de carpas
especializado en la venta de productos cárnicos y el restaurante La
Fortaleza. Su vinculación a entidades de la rama agrícola forma
parte de las nuevas concepciones de comercialización; además,
muestra la efectividad de conectar a destacados productores de la
agricultura urbana con unidades gastronómicas.
Lazo insistió en la necesaria retribución al esfuerzo estatal.
"De nada vale embellecer las unidades y dotarlas de un moderno
equipamiento, si los gastronómicos no son capaces de cuidarlas y
brindar un buen servicio".
Lázaro Expósito, primer secretario del Partido en la provincia,
explicó que las mejoras irán acompañadas de un salto cualitativo,
pues atender con esmero al pueblo tiene un componente ético que se
relaciona con no alterar las normas y precios, hacer un uso racional
de los recursos y velar por el cumplimiento de los planes sin
sacrificar la calidad. Lo contrario resultaría improcedente,
inadmisible y desacertado, señaló.
La reparación o construcción de más de 150 unidades del comercio
y la gastronomía durante el último trienio, está entre las acciones
de mayor impacto social para la familia santiaguera.
Restaurantes, pizzerías, cremerías, dulcerías, mercados y la
ampliación del coppelia La Arboleda expresan —en síntesis— el
esfuerzo de las autoridades locales por satisfacer las necesidades y
reclamos de la población.
En función de elevar el bienestar y la satisfacción social se han
terminado en Santiago de Cuba alrededor de 1 000 obras de otros
sectores, entre ellas la restauración de todos los cuerpos de
guardia de los hospitales y la gradual recuperación de decenas de
establecimientos de la industria alimentaria.
Lazo se interesó por la rehabilitación integral del acueducto
santiaguero, inversión que se recupera de serias críticas y debe
concluir en noviembre.