CHICAGO,
2 de mayo.— Manifestantes en todo Estados Unidos expresaron su furia
por la nueva ley represiva de la inmigración ilegal en Arizona y
urgieron al presidente Barack Obama a que abrace inmediatamente la
causa de la reforma inmigratoria, reportó AP.
Desde Los Ángeles hasta Washington, activistas, familias,
estudiantes e incluso funcionarios públicos marcharon, ejercieron la
desobediencia civil y confesaron su estatus inmigratorio en nombre
de los derechos de los inmigrantes, incluidos los alrededor de 12
millones que viven indocumentados.
Obama había prometido abordar la reforma inmigratoria durante sus
primeros 100 días de gobierno, pero la ha pospuesto varias veces.
Un congresista estuvo entre las 35 personas arrestadas durante
una protesta frente a la Casa Blanca. El representante federal
demócrata Luis Gutiérrez, de Illinois, participó en una demostración
de desobediencia civil antes de su detención.
Las manifestaciones en otros lugares fueron principalmente
pacíficas.
La policía reportó que 50 000 personas se manifestaron en Los
Ángeles.