"Muchas
gracias, Tomás", con estas palabras agradecieron a una sola voz los
asistentes al Teatro Mella, de la capital, la fecunda trayectoria
del bailarín, coreógrafo, cantante y director artístico Tomás
Morales Villena quien recibió el Día Internacional de la Danza, de
manos de Rafael Bernal, viceministro primero de Cultura; Miguel
Barnet, presidente de la Unión de Artistas y Escritores de Cuba, y
Julián González, presidente del Consejo Nacional de las Artes
Escénicas (CNAE), el Premio Nacional de Danza 2010, galardón que
reconoce la obra de toda la vida.
En
un espectáculo donde desfilaron los más variados géneros de la danza
moderna, el cabaret Tropicana, el Conjunto Folclórico Nacional,
Danza Contemporánea de Cuba, el Ballet ICRT y el Circo Nacional,
entre otros, el cierre artístico estuvo a cargo de la cantante Omara
Portuondo que, a capella y frente al maestro, interpretó los temas
Aquellos ojos verdes y Amiga. Audiovisuales con
imágenes y presentaciones de la carrera de Morales igualmente fueron
proyectados en la gala, dirigida por Santiago Alfonso también Premio
Nacional de Danza y presidente del jurado que, por unanimidad,
decidió reconocer el amplio espectro de manifestaciones y estilos en
los que incursionó Morales con peculiar versatilidad y maestría
durante más de medio siglo de vida artística.
Bailarín de mil escenas, así catalogó la coreógrafa Cristy
Domínguez al fundador del Conjunto Experimental de Danza, discípulo
de Luis Trápaga, Alberto Alonso, Joaquín Banegas y Harold Cole,
quien a sus 74 años trabaja actualmente como director general y
coreógrafo del cabaret Tropicana.
Morales, galardonado con la Distinción Nicolás Guillén y la
Medalla Raúl Gómez García, dedicó el lauro que confiere el CNAE —y
que ostentan además Ramiro Guerra, Fernando Alonso, Isidro Rolando,
Josefina Méndez, Aurora Boch, Loipa Araújo, entre otros— a todos los
jóvenes y artistas, a sus compañeros de Tropicana y a todos los
presentes.