Una nueva sede para la Escuela de Oficios de Restauración
"Fernando Aguado y Rico", de la ciudad de Trinidad, una de las cinco
de su tipo en Cuba, se erige en la Plaza Carrillo de la antiquísima
villa de la provincia de Sancti Spìritus.
Jesús Alexis Jorge Fernández, director de la institución, dijo a
la AIN que el área posee cerca de 900 metros cuadrados, lo que
permitirá incorporar nuevas especialidades y locales.
Además, mejorarán las condiciones de estudio de los jóvenes que
necesitan cursos teóricos y prácticos.
Laboratorios de computación, aula de conferencias, albergues,
cátedras, talleres de herrería, yeso, carpintería y cerámica, y
polígono de albañilería, son algunas de las instalaciones que ya se
construyen por los propios estudiantes, apuntó Narciso Rodríguez,
ejecutor de la obra.
Fundada en 1998 por la Oficina del Conservador de la Ciudad de
Trinidad y el Valle de los Ingenios, en las ruinas del Palacio de
Bécquer, la escuela enseña las técnicas tradicionales de
construcción y garantiza la continuidad de los oficios
imprescindibles en la conservación y restauración.
En el primer año los jóvenes alternan entre las sesiones teóricas
y las clases prácticas mediante las cuales los instructores corrigen
la labor, y en el segundo están vinculados a tiempo completo en las
obras asignadas, refiere Jorge Fernández.
Pese a que ahora solo se imparten cursos de albañilería,
carpintería y de recalificación de herrería, cuando se termine el
centro podrán incorporarse otros de yeso, arqueología y pintura
mural.
Desde su creación, la Fernando Aguado y Rico ha graduado cerca de
180 educandos, quienes durante sus estudios tienen garantizados el
vestuario, las herramientas, y los medios de protección.
Además de la Escuela de Oficios de Restauración de Trinidad, en
Cuba existen instituciones similares en Ciudad de la Habana,
Cienfuegos, Santiago de Cuba y Camagüey.