SANTA CRUZ, Bolivia.— La Asociación de Cubanos Residentes en Santa Cruz, Bolivia, repudia firmemente la campaña mediática que se viene desarrollando contra nuestro glorioso pueblo. Estamos conciente de la grandeza y heroicidad de nuestra patria.

Lo único que Cuba a hecho durante todos estos años es ayudar a mas de medio mundo, un país que supo venir de abajo, que su población no es tan grande que digamos, que es pequeño en extensión territorial, que hasta 1959 era un país donde solo vivían los adinerados y terratenientes, un país que conoció la libertad hace tan solo medio siglo no tiene por qué ser juzgado injustamente, mucho menos por ese imperio brutal, que nunca cesó en su ánimo de derrocar a nuestra gloriosa Revolución.

Cuba es un ejemplo para el mundo, todos los logros del pueblo cubano se traducen en el significado de Libertad y democracia. Cuba no asimila la mentira, Cuba creció con la dignidad y voluntariedad que le caracteriza, Somos un país firme, inclaudicable, un país luchador, trabajador, un país que nos hemos ganado el respeto mundial, y por mucho que difamen en contra de nuestro pueblo jamás lograrán su objetivo, porque para que aquel imperialista yanki o mafia anticubana esté pensando en derrocarnos por medio de la mentira y de campañas mediáticas sepan que tendrán que acabar con más de 11 millones de habitantes, incluso con cubanos como nosotros, que aunque estemos lejos de nuestra patria estamos dispuestos a defenderla al precio que sea necesario, que no les quepa la menor duda.

La Asociación de Cubanos Residentes en Santa Cruz mantiene una firme y valiente posición ante la injusta campaña contra nuestro país. Jamás estaremos de acuerdo con actos tan corruptos y estúpidos como los que viene desarrollando el imperio a través de publicaciones falsas y políticas.

Con nuestro pueblo no valen campañas falsas ni mediáticas, con nuestro pueblo hay que entrar con la verdad, sépanlo muy bien. No intenten manchar la gloria y la dignidad de nuestra revolución, por muy grande que sea el imperio sepan, señores imperialistas, que el corazón y la verdad de Cuba son tan grandes como su propia historia.