Con el homenaje a los combatientes caídos y ante el busto que muestra la herida 27 del General Antonio Maceo, fue recordado en la ciudad de Santiago de Cuba el aniversario 49 de los bombardeos mercenarios a aeropuertos cubanos.

El 15 de abril de 1961 aviones de guerra atacaron simultáneamente la base aérea de San Antonio de los Baños, la pista de Ciudad Libertad y el actual aeropuerto internacional Antonio Maceo, lo que sería el preludio de los sucesos acaecidos en Playa Girón dos días después.

Como parte de la Jornada Ideológica Victoria de Girón y la proclamación del carácter socialista de la Revolución Cubana, entregaron al aeropuerto santiaguero la réplica de la pistola utilizada por Frank País en sus años de lucha clandestina.

También trabajadores con 20 y 25 años de servicios en la aviación civil recibieron la distinción José María Pérez Capote y fue colocada una ofrenda floral en el busto erigido a Antonio Maceo, que ese día resultó impactado por un proyectil de ametralladora.

Luis Peña, uno de los presentes en la acción, dijo a la AIN que lo sorpresivo del ataque, que duró unos 12 minutos, conllevó a causar mayor destrucción y heridos en el aeropuerto, mientras los 53 compañeros que integraban el orden combativo defendían sus posiciones y la instalación.

Entre los principales daños subrayó que quedaron destruidos siete aviones y la torre de control, aunque con la ayuda de los trabajadores, milicianos y combatientes -una hora después- quedó sofocado el incendio provocado por el violento bombardeo.

La acción perseguía como objetivos, además de provocar miedo y confusión, destruir en tierra la escasa y anticuada fuerza aérea cubana, para asegurar la impunidad de otras incursiones enemigas por vía terrestre.