Venezuela inauguró este jueves en Barquisimeto, 350 kilómetros al
oeste de Caracas, el sexto de 10 hornos especializados para la
incineración de drogas, como parte de su programa antinarcóticos.
Con una inversión de un millón 711 mil bolívares (658 mil
dólares), la instalación tiene capacidad para destruir mil
kilogramos al día en jornada de ocho horas.
Durante 2009 se construyeron hornos similares en los estados de
Vargas, Táchira, Zulia,y Anzoátegui y en 2010 en el de Nueva
Esparta, como parte de un la estrategia diseñada para disminuir la
necesidad del traslado de las drogas del lugar de su decomiso.
Los hornos son ecológicos, pese a que se destruyen sustancias
tóxicas con determinados componentes químicos.
Al inaugurar la instalación, el ministro de Interior y Justicia,
Tareck El Aissami, destacó que en lo que va de año se ocuparon 15
toneladas y medio de drogas y fueron detenidas mil 911 personas por
delitos relacionados.
El año pasado Venezuela decomisó más de 60 toneladas de drogas,
11 por ciento más que en 2008, en su mayor parte marihuana y cocaína
procedente de la vecina Colombia, la mayor productora mundial de esa
sustancia ilegal.
Asimismo fueron arrestados cerca de nueve mil individuos por
delitos relacionados con las drogas en 2009, se destruyeron 26
laboratorios clandestinos en la frontera con Colombia y se
decomisaron 30 aviones usados para el tráfico ilegal.
Venezuela no produce ni es gran consumidor de drogas, pero sufre
las consecuencias del fenómeno debido al uso de sus fronteras con
Colombia por los contrabandistas que utilizan su territorio como
puente para llegar a Estados Unidos y Europa.
Además del combate a la producción y tráfico, que incluyó la
inversión de 260 millones de dólares en la compra e instalación de
10 radares para rastrear vuelos ilegales, las autoridades elaboraron
un programa de prevención para evitar el incremento del consumo.
Unos 100 mil venezolanos fueron preparados como asesores
comunitarios en prevención y se proyecta preparar para 2013 a cinco
millones 500 personas
ese a las acusaciones de Estados Unidos de no cooperar en la
lucha internacional contra el flagelo, luego de suspender acuerdos
con la Agencia de Antidrogas estadounidense (DEA) Venezuela mantiene
medio centenar de acuerdos con 38 países.
En los dos años siguientes a la suspensión de los acuerdos de
cooperación con la DEA por intromisión en asuntos políticos
internos, las incautaciones aumentaron 38 por ciento.