El embajador venezolano en Uruguay, Franklin González, consideró
como un reto para la Asociación Latinoamericana de Integración
(ALADI), que las tres visiones integradoras en su seno puedan
convivir en el futuro próximo, reporta Prensa Latina.
González, quien concluye su labor en este país, señaló en su
despedida como representante en el ente que el citado desafío es
sobre la base de la identificación de cada una con el funcionamiento
y las labores de la asociación.
Existe en curso un tremendo proceso de integración que acerca a
unos países con otros, que experimenta avances y retrocesos, pero
donde prevalece la existencia de un nuevo sentido común, enfatizó.
Según el diplomático, la mayoría de los gobiernos del área
comprenden se necesitan mutuamente para funcionar mejor en la
compleja economía mundial actual máxime, subrayó, cuando el
paradigma del capitalismo está inmerso en una profunda crisis.
Destacó entre las iniciativas de unificación a la Alianza
Bolivariana para los Pueblos de América Latina y el Caribe (ALBA)
donde se habla, dijo, más bien de complementación y la solidaridad y
en la cual la dimensión social es asunto de primer orden.
Manifestó que en el proceso de unión no llega a imponerse un
modelo único que excluya al otro sobre todo, precisó, en las
actuales circunstancias donde la política pareciera prevalecer por
sobre lo comercial.
González expresó que la región se ha visto enfrentada en los
últimos años a cambios significativos de orden político, económico y
social, que trascienden las fronteras de los países en un orden
internacional interdependiente y asimétrico.
La ALADI para catapultarse en el futuro, tiene que
consustanciarse con la cambiante realidad de hoy, expresó.
Fundada en 1980 mediante el Tratado de Montevideo, la ALADI es el
mayor grupo latinoamericano de integración y sus países miembros son
Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, México,
Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.