Las Fuerzas Armadas venezolanas están con el presidente Hugo Chávez y la Revolución, lo cual complica las pretensiones opositoras de reeditar el golpe de Estado de 2002, aseguró este lunes el ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello.

La inmensa mayoría de nuestros militares reconocen y respaldan el liderazgo del presidente, quien como nunca antes se ha preocupado por las condiciones de vida del ejército, precisó en declaraciones exclusivas a Prensa Latina.

De acuerdo con el titular, Chávez mantiene un constante intercambio con las tropas independientemente del rango de los efectivos.

Yo fui a una escuela militar, y el único día que vi al presidente de la República fue cuando me gradué de subteniente en 1985. Ahora para cualquier cadete es normal que Chávez le toque la puerta para conversar y preocuparse por sus problemas, apuntó.

Para Cabello, semejante vínculo Fuerzas Armadas-Poder Ejecutivo pone a pensar a la derecha antes de enrolarse en una aventura como la de hace ocho años.

Entonces unos 80 generales sin tropas y con muchas cámaras de medios opositores se fueron a la Plaza Altamira, traicionando al pueblo y la Constitución, escenario mucho menos probable en la actualidad, expuso.

Según el ex vicepresidente y jefe de Estado interino (fue juramentado en espera del retorno de Chávez durante la asonada del 11 al 13 de abril de 2002), la contrarrevolución mantiene su agenda violenta y golpista.

Ellos no abandonan las vías antidemocráticas porque tienen un jefe, el imperio norteamericano, que no está dispuesto a renunciar a un país con la primera reserva petrolera del planeta, potencialmente la cuarta gasífera y la séptima en agua, el recurso de las guerras del futuro, advirtió.

Cabello dijo que las presiones siguen de parte de quienes quieren recuperar el poder y los privilegios.

No podemos descartar que por ahí quede algún militar que le deba favores a los viejos partidos de la cuarta república (1958-1998), como Acción Democrática y COPEI, o sus franquicias, pero más allá de alguna individualidad las Fuerzas Armadas son leales a Chávez y la Revolución, aseveró a Prensa Latina.

Para el también dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela, si queda algún traidor lo mejor sería su destape.