NUEVA
YORK.— El argentino Juan José Campanella, reciente ganador del Óscar
a la mejor película extranjera con El secreto de sus ojos, asegura
que en un plazo de cinco años "todas las películas, hasta las más
comunes", se van a rodar en 3D.
"En cinco o seis años, hacer una película que no sea en 3D será
una decisión creativa como lo es hoy rodar en blanco y negro",
explicó el cineasta en una entrevista con EFE en Nueva York, donde
promociona su última película, una cinta que, tras el éxito de los
Óscar, se estrenará este mes en sesenta ciudades de Estados Unidos.
Campanella, conocido tanto por los éxitos del cine argentino El
hijo de la novia (2001) o Luna de Avellaneda (2004) como por su
experiencia en la televisión estadounidense, dijo que la inmensa
mayoría del cine que se produzca va a contar con esa tecnología y
que el público estará "muy acostumbrado a ello".
"Esa tecnología está aquí para quedarse, y me veo dirigiendo una
película en 3D con actores reales. Mi trabajo es contar historias y
eso no va a cambiar pese a todos esos avances", señaló el director,
quien prepara de momento una cinta de animación en 3D, llamada
Metegol/Futbolín, que quiere realizar en su país natal.
El director reconoció así su interés por rodar una película con
intérpretes de carne y hueso en tres dimensiones, pero en la que la
historia tenga un peso importante, algo en lo que, a su juicio, está
fallando el cine de Hollywood, donde "se pierden por el camino de la
tecnología y no piensan en la historia".
"El cine sigue pasando por la dramaturgia, como pasó toda la
vida, desde los griegos y hasta ahora, pero Hollywood pasa por una
etapa de transición en la que se busca el rumbo y sólo se centra en
la tecnología", lamentó el cineasta.
Para Campanella, el 3D supone un avance como el que se produjo
"cuando se inventó el color, aunque no una revolución como cuando
llegó el cine sonoro, una época en la que nadie sabía escribir un
guión, muchos actores se quedaron sin trabajo y se tuvo que
reinventar todo".
El argentino, que ha trabajado en la televisión estadounidense
desde 1992 y ha dirigido capítulos de series tan exitosas como 30
Rock, La ley y el orden y Doctor House, aseguró asimismo que
considera que "las series estadounidenses son ahora mejores que las
películas de Hollywood".