Con una inescrupulosa resolución y pretensiones de erigirse en juez
supranacional, el Parlamento Europeo imita, con poca originalidad y
demasiado retraso, la postura anticubana de sus colegas de
Washington, clara evidencia de la subordinación de los grupos de
poder del Viejo Continente a la agresiva política del gobierno de
Estados Unidos contra nuestro país a lo largo de más de medio siglo.
Aprobado por el Parlamento Europeo, el texto reitera una
desmedida inquietud del legislativo de la Unión Europea por la
"situación de los derechos humanos en Cuba", gesto loable desde una
óptica humanitaria, pero fuera de su área de competencia y a la vez
preocupante por las circunstancias que rodean su aparición, así como
por los vínculos de sus promotores con los sectores más
conservadores de la política estadounidense, entre los que se
cuentan los grupos anticubanos y terroristas radicados en el sur de
la Florida. Sin embargo, nunca antes este Parlamento se ha
pronunciado por las torturas en Iraq, en la ilegal Base Naval de
Estados Unidos en Guantánamo o por la existencia de cárceles
secretas en territorio europeo.
Impulsada por una desmesurada campaña mediática, la Resolución
del Parlamento Europeo ignora la existencia en Cuba de una nación y
un gobierno constituido y define como disidentes a personas
sentenciadas por delitos comunes y otras financiadas por colaborar
con una potencia extranjera; alentando sin reservas, una transición
hacia el pluripartidismo, elementos comunes a las leyes
norteamericanas Torricelli y Helms-Burton.
Ante semejante hecho, los economistas y contadores cubanos
expresamos nuestro absoluto rechazo a esta nueva forma de
irrespetuosa injerencia, cuyos fines intensifican el hostigamiento
contra nuestro pueblo y alientan el fracaso de las gestiones del
gobierno español por eliminar la absurda "Posición Común", adoptada
en 1996 y que desde entonces entorpece los vínculos normales con
Cuba de los 27 estados miembros de la Unión Europea. Como parte
integrante y activa de la Sociedad Civil Cubana nos oponemos a la
incitación de utilizar la colaboración como instrumento de chantaje
y presiones y exigimos respeto a nombre de nuestra Organización No
Gubernamental con estatus consultivo especial de ECOSOC (Consejo
Económico y Social de las Naciones Unidas), integrada por más de 79
mil economistas, contadores y auditores.
Frente a las diatribas elaboradas lejos de las fronteras europeas
y repetidas por los obedientes legisladores, los profesionales de
las ciencias económicas en Cuba, levantamos con dignidad la obra de
justicia y solidaridad escrita por millones de compatriotas en las
más variadas latitudes, entre ellos, cinco héroes cubanos, quienes
cumplen injustas sentencias por luchar contra el terrorismo en
cárceles de Estados Unidos.
Como cubanos, como hombres y mujeres comprometidos con el legado
de esfuerzos y sacrificios de nuestro pueblo por más de medio siglo,
condenamos la incapacidad, la ignorancia y el servilismo de los que,
en nombre de la justicia y la humanidad, se suman a la política
genocida de Estados Unidos contra Cuba, sin reparar que los frutos y
el ejemplo de su Revolución, pesan demasiado en la memoria de los
pueblos y en la balanza de la historia.
La Habana, 24 de marzo del 2010
Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba