La alianza del ex primer ministro Iyad Allawi, Al-Iraqiya, logró
este sábado una ligera ventaja en el escrutinio electoral de Iraq,
en medio de renovadas tensiones y de amenazas de ataques de Al-Qaeda
contra los partidos políticos.
Tras completar el conteo del 93 por ciento de los votos emitidos
el 7 de marzo, certifica la agencia de Prensa Latina la alta
Comisión Electoral Independiente (ACEI) confirmó que la agrupación
de Allawi consiguió una estrecha victoria respecto a Estado de
Derecho, del actual jefe de gobierno, Nouri Al-Maliki.
La máxima instancia electoral aclaró que los resultados aún son
preliminares, y que Al-Maliki está a la cabeza en Bagdad, la
capital, mientras Allawi se impone en la norteña Nínive.
Asimismo precisó que los datos no incluyen todavía el sufragio de
los 630 mil soldados, policías, presos y pacientes de hospitales que
acudieron a la votación especial, ni el de los cerca de dos millones
de iraquíes residentes en 16 países.
Allawi, un chiita laico, gana bastante respaldo de la minoría
sunnita iraquí debido a su oposición al sectarismo y su discurso
condenatorio de lo que cree una influencia chiita del vecino Irán,
país donde es predominante esa rama del Islam.
De acuerdo con la ACEI, en la lid a nivel de provincias por los
325 asientos del parlamento nacional, Estado de Derecho (EDD) supera
a Al-Iraqiya (AI) en siete de las 18 demarcaciones de Iraq, sobre
todo en las chiitas del sur, mientras la segunda gana en cinco,
afirma PL.
En el caso de Nínive, AI va delante de la Alianza del Kurdistán
con 514 mil 470 boletas a favor frente a 197 mil 785, indicó la
ACEI.
Las segundas elecciones parlamentarias de Iraq tras la invasión
militar estadounidense de marzo de 2003 son determinantes para
elegir el próximo gobierno, bajo cuya gestión deberá completarse la
salida definitiva de las tropas de Washington, a finales de 2011.
El presidente de la influyente Región Autónoma del Kurdistán,
Massoud Barzani, anunció que se reunirá con los líderes de los
bloques ganadores después de las fiestas religiosas del Nowruz, para
impulsar alianzas con los kurdos y posturas unificadas en Bagdad.
Por otro lado, el grupo Estado Islámico de Iraq (EII), vinculado
a Al-Qaeda y reivindicador de varios atentados letales en la
capital, anunció una campaña militar coordinada contra los partidos
políticos, según una alocución radial de su líder, Omar al-Baghdadi.
EII amenazó a los votantes para que no acudieran a las urnas y se
adjudicó los ataques que el día de las elecciones causaron 39
muertos y 84 heridos, pero ahora anunció que arremeterá contra la
dominación chiita sobre los sunnitas.