Las víctimas del sabotaje del buque francés La Coubre, fueron recordadas al ser homenajeada su memoria en el muelle de la bahía capitalina donde ocurrió el siniestro hace hoy 50 años.

El tributo a los caídos en las explosiones, fue presidido por Jorge Luis Sierra, titular del Ministerio de Transporte, y Mercedes López Acea, primera Secretaria del Partido Comunista de Cuba en Ciudad de La Habana.

Tras ser depositadas varias ofrendas florales en la tarja que recuerda a las víctimas, la dirigente partidista hizo un breve relato de los acontecimientos de la tarde del cuatro de marzo de 1960, cuando la explosión del buque francés La Coubre, que procedente de Amberes, Bélgica, descargaba armas desde el día anterior, sacudió a la capital cubana.

Trece minutos después se produjo una segunda explosión que cobró numerosas vidas entre las personas que acudieron a rescatar a las primeras víctimas.

Lopez Acea destacó el carácter bárbaro de la acción que ocasionó la muerte de cientos de personas y heridas graves a otras tantas, a la vez que instó a Washington a desclasificar los documentos referidos al sabotaje para hacerle justicia a los verdaderos culpables.

El vapor La Coubre traía un cargamento de armas compradas por el gobierno cubano a Bélgica, que a pesar de las presiones estadounidenses para cancelar la entrega mantuvo su palabra.

Ante la inminencia de la llegada del envío a la Isla, agentes al servicio de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos, colocaron un artefacto explosivo entre cajas de granadas antitanques, el cual se activó al momento de retirar la carga situada sobre él.

Al día siguiente, una multitud, conmovida e indignada, acompañó el sepelio, donde el máximo dirigente de la naciente Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, expresó el sentir de todos los cubanos al denunciar a los autores del crimen y ratificar la decisión de continuar adelante el proceso.