La necesidad de aprovechar mejor la superficie cultivable para
producir alimentos, predominó en el pleno de la Asociación Nacional
de Agricultores Pequeños (ANAP), en el municipio de Guantánamo,
previo al X Congreso de la organización.
Juan Enrique López, funcionario de la dirección nacional de la
entidad que agrupa a todos los tenentes de tierra cubanos, precisó
que el tópico ha sido una constante también en las reuniones del
resto del país con vista al cónclave, que sesionará en Ciudad de La
Habana, del 15 al 17 de mayo.
Señaló que en los plenos el sector cooperativo y campesino, se
analiza la producción de cultivos varios, leche, carne y arroz, con
el fin de enriquecer la mesa cubana y sustituir importaciones, y
cómo ser más eficiente con los recursos de que dispone el país.
Entre los que practican ese principio y avanzan en el aumento de
la producción figuran los más de 200 asociados de la Cooperativa de
Créditos y Servicios Enrique Campos Caballero, mejor del país en la
rama de cultivos varios.
Antonio Márquez Calavia, presidente de esa organización de base,
y primer delegado directo de la provincia al cónclave, al referirse
a los beneficiados por el Decreto Ley 259 (sobre la entrega de
tierras en usufructo), subrayó que cuentan por esa vía con 100
nuevos miembros, a quienes se brinda especial prioridad.
Enrique Romero, máximo dirigente de la organización en
Guantánamo, llamó a atajar a tiempo la tendencia de algunos nuevos
usufructarios a solicitar recursos, de los cuales no disponen
siquiera los que han laborado la tierra durant muchos años.
No quiere decir, indicó Romero, que la ANAP deje de atender esas
solicitudes cuando sea factible resolverlas, "pero lo cierto es que
muchos se quejan de que no tienen alambre para construir cercas, y
otros las levantan con Cardona e incluso Magnolia".
Martha Méndez Zamora, miembro del Buró Municipal del Partido
Comunista de Cuba, llamó a prestar especial atención al cumplimiento
de la legalidad y a ser selectivos en la entrega de tierra
estipulada por el Decreto, la cual deben recibirla aquellos capaces
de hacerla producir.