.— La India rindió
tributo hoy a Mahatma Gandhi en ocasión de cumplirse el aniversario
62 de su asesinato en esta capital a manos de un radical hindú
opuesto a su programa de tolerancia religiosa.
El principal sitio de peregrinación fue el memorial Rajghat, que
marca el lugar donde fueron cremados sus restos a orillas del río
Yamuna, en esta capital.
El homenaje lo encabezaron la Presidenta de la India, Pratibha
Patil, el Primer Ministro Manmohan Singh y los líderes de los
principales partidos políticos.
En ocasión de la fecha, instituida como el Día de los Mártires en
el país surasiático, también se ofició en el Rajghat un servicio
multireligioso al que asistieron creyentes de la fe budista, bajai,
cristiana, hindú, jainista, judía, parsi y sikh.
El museo en que fue convertida la casa donde fue asesinado el 30
de enero de 1948, también organizó un programa especial para rendir
tributo a la personalidad más universal de la India contemporánea.
Gandhi luchó de forma pacífica por la independencia de su país de
la corona británica, y para ello desarrolló un método de acción
social directa basado en los principios de la no violencia.
Su sueño de ver una India unida tras la retirada de los ocupantes
británicos en 1947 se vio frustrado, sin embargo, tras la división
de la península indostánica para crear el nuevo estado de Paquistán,
acción que derivó en enfrentamientos entre hindúes y musulmanes.
El 13 de enero de 1948, con 78 años de edad, comenzó un ayuno en
protesta por el derramamiento de sangre, y en menos de una semana
logró convencer a los grupos rivales para que depusieran las armas.
Fue muerto a tiros en su casa un día como hoy, pero de 1948, por
un fanático de su propia fe instigado por grupos radicales hindúes
que no compartían sus llamados a ser tolerantes con todas las
religiones y credos.
En la fecha de su asesinato también se observa el Día Mundial de
la No Violencia y la Paz.