La comunidad de haitianos y sus descendientes que residen en la provincia cubana de Camagüey, agradecieron la ayuda de los países que de manera solidaria brindan su aporte a la nación caribeña, especialmente Cuba, Venezuela y Brasil.

Adolfo Machado Dimanche, quien preside esa colectividad de más de 30 mil miembros, señaló que esos tres estados fueron los primeros en auxiliar a la población de Puerto Príncipe, capital de Haití, severamente dañada por un terremoto el pasado día 12, el cual ocasionó más de 100 mil muertos.

Personal médico y de socorro trabajó de inmediato y sin descanso con todo amor para brindar alivio y salud a los heridos por el sismo, expresó.

Agregó que los integrantes de la comunidad de inmigrantes están dispuestos a partir para Haití en cualquier momento, para cooperar en la tarea que se le asignara en la reconstrucción de su país de origen.

Machado Dimanche manifestó que la congregación tiene gran preocupación con el arribo de numerosa fuerza militar de Estados Unidos a la nación antillana con el pretexto de normalizar la situación.

Recordó que en 1915 tropas norteamericanas desembarcaron en Haití para supuestamente pacificar al país y lo ocuparon durante 19 años, dejando una estela de muerte, ignorancia, miseria, desorganización y una deuda que ha pagado muchas veces y aún hoy debe.

La opinión pública mundial tiene que estar vigilante con esa presencia militar en Haití porque no sabemos lo que pretende Estados Unidos con sus soldados allí, reclamó.