China anunció la disminución por cuarto año consecutivo de las
emisiones de dióxido de azufre, resultado que permitirá cumplir a
tiempo la meta establecida para ese contaminante en el XI Plan
Quinquenal 2006-2010.
Así lo declaró en esta capital el ministro de Protección
Ambiental, Zhou Shengxian, durante una conferencia nacional reseñada
hoy por medios de prensa locales.
Zhou indicó que las expulsiones a la atmósfera de ese gas
(precursor de la lluvia ácida) cayeron 10,4 por ciento en 2009 en
relación con 2008 y 24,6 con respecto a 2005.
El gobierno fijó el objetivo de reducir las emisiones de
contaminantes importantes como el dióxido de carbono y el dióxido de
azufre (SO2), en 10 por ciento entre el 2006 y el 2010.
También, la Demanda Química de Oxígeno (DQO), parámetro que se
utiliza para medir el grado de polución en medios líquidos, bajó por
cuarto año consecutivo luego de instituirse la meta, precisó el
ministro.
Expresada en miligramos de oxígeno por litro, la DQO calcula la
cantidad de materia orgánica susceptible de ser oxidada por medios
químicos en una muestra de agua residual.
Zhou atribuyó la reducción exitosa de las emisiones de dióxido de
azufre a la aplicación del proceso de desulfurización o
desulfuración, consistente en extraer el sulfuro de hidrógeno (H2S)
contenido en el biogás, que resulta de la quema de combustibles
fósiles.
Sin embargo, señaló que el descenso de la DQO resulta difícil, al
ser el valor muy distinto entre las regiones del país más poblado
del mundo.
Adelantó además una merma para 2010 de más de 400 mil toneladas
del gas descrito, en tanto unas 200 mil toneladas de DQO podrían
disminuir después de concluido el XI Plan Quinquenal.
Como parte del esfuerzo por aminorar las emisiones de gases de
efecto invernadero, previo a la reciente cumbre de Copenhague, el
gigante asiático anunció la reducción para el 2020 entre el 40-45
por ciento la intensidad de las emisiones de dióxido de carbono por
unidad de Producto Interno Bruno respecto a los niveles del 2005.