La fuerte réplica sentida, de 6,1 en la escala de Richter,
acentuó el pánico de la población de esta capital y sus alrededores,
que se mantiene viviendo en plazas, parques y calles, pero no
interrumpió la heroica labor del personal cubano de la salud.
El Instituto Geológico de Estados Unidos había informado que los
movimientos telúricos registrados en Puerto Príncipe, se han
manifestado de manera frecuente con una intensidad entre los 4,4 y
5,9 grados, por lo que el de este miércoles se inscribe como el
segundo más intenso.
Entretanto, continuaron las acciones de la brigada medica cubana
de la salud y de su reforzamiento con estudiantes haitianos de la
Escuela de Medicina Latinoamericana en Santiago de Cuba.
Carlos Alberto García Domínguez, uno de los integrantes de la
dirección cubana ante el desastre en Haiti, informó que en el centro
de la capital se dan atenciones hospitalarias en tres unidades (uno
multinacional, en Delmas 33, donde se han unido colaboradores de
España, Uruguay, Venezuela, Colombia, Mejico y otros; en
Rennaissance y en Ofatma, todas con personal especializado y
servicios quirúrgicos las 24 horas del día).
Igualmente laboran en seis comunas de la periferia de la referida
urbe y de este Departamento del Oeste: Se han habilitados ocho
centros que incluyen cuatro Centros de Diagnostico Integral CDI-),
en otros departamentos del país.
La afluencia de pacientes ha aumentado en las últimas 48 horas.
Se reportó que un barco utilizado por las fuerzas humanitarias de la
ONU trasladó cerca de mil 500 personas hacia del Departamento de la
Grand Anse, al suroeste de Haití.
La pauta seguida por el personal cubano de la salud y de apoyo
es, en primer lugar, un trabajo intenso de atención primaria, que se
realiza con grupos de cuatro integrantes de la ELAM, con acciones de
pesquisaje entre la población en la cual en algunos persiste el
pensamiento de la medicina privada anterior, y al no tener dinero se
quedan sin acudir a los centros habilitados gratuitamente.
Cuba envió 400 mil dosis de vacunas de toxoide antitetánico
utilizadas en pacientes con lesiones o heridas.
Los operados algunos con miembros amputados- regresan a los
lugares de residencia o donde pernoctan al aire libre, y donde se
les hace un seguimiento a sus heridas, pues no hay capacidad de
ingreso en los hospitales.
También figura la promoción de salud, con volantes y altavoces en
las calles. Esta se ejecuta en lengua creole para la orientación de
la población.
Acciones mas intensas, de control sanitario, se despliegan en
estos momentos, para lo cual se fija una estrategia con los recursos
humanos disponible.
Ante las replicas del sismo el personal cubano ha adoptado las
medidas de protección adecuadas y afronta nuevas emergencias ante la
posible aparición de mas lesionados. Este martes se monto un
hospital de campaña en Leoganes, una de las zonas más perjudicadas,
y de manera rápida y eficiente en menos de doce horas ya había
practicado 16 intervenciones quirúrgicas.
Hoy miércoles se instalara en Jacmel otro hospital de campaña.
De manera que las cuatros acciones principales que se acometen es
identificar a pacientes lesionados y aun sin atención medica,
aplicar la vacunación, realizar la promoción de salud y la
continuidad de observación de los pacientes intervenidos
quirúrgicamente.
Ese panorama brindado por el dirigente cubano se desarrolla en la
capital haitiana en la que, a pesar de los intentos de reiniciar sus
actividades, sobre todo del comercio informal, mantiene la
desarticulación de su vida normal.
En las calles miles de personas deambulan de un lado hacia el
otro, muchos con bidones, cubos, tanques medianos, pomos plásticos y
otros recipientes para recibir un poco de agua en los puntos en que
se sitúan pipas y otros vehículos de distribución del líquido. Hay
angustia, pero no se ha llegado a un punto de desesperación. Sino,
que lo digan los centenares de lugares en las calles de Petionville
donde, sobre lonas en el piso, se comercia plátano, ñame, malanga,
boniato, zanahoria, lechuga, toronjas y variadas bisuterías y
artículos comestibles y bebestibles (ron y whisky incluidos) sin que
haya aglomeraciones o forcejeos.En el centro de Puerto Principe,
donde radicaban las grandes tiendas y mercados, se dan escenas de
intentos de saqueo por algunos aprovechadores, lo cual es reprimido
por los cuerpos policiales haitianos y de la Misión de las Naciones
Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH sus siglas en
francés).