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El vicepresidente boliviano, Álvaro García, viajó hoy a Puerto
Príncipe en un avión militar para entregar ayuda humanitaria del
Estado andino a los damnificados del terremoto de Haití, que dejó
cientos de miles de víctimas.
Ese primer lote de cooperación humanitaria consiste en una
tonelada de sangre y plasma, donada por los bolivianos los últimos
días, y cinco toneladas de medicamentos, alimentos y vituallas.
García tiene previsto reunirse con el batallón del país
suramericano que forma parte de la comisión de paz de los cascos
azules de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), quienes
actualmente prestan ayuda a los damnificados en Haití.
El pasado sábado, el presidente Evo morales subrayó que este
envió para el estado caribeño será el primero y abogó por la
solidaridad de los bolivianos para organizar otros viajes con
medicamentos y vituallas.
De acuerdo con estimaciones de Naciones Unidas, la cifra de
afectados por el sismo de 7,3 grados en la escala abierta de Richter,
que el pasado martes sacudió a Haití, podría superar los tres
millones de personas.
El movimiento telúrico causó severos daños a la ciudad de Puerto
Príncipe, capital haitiana, y grandes destrozos en los centros
urbanos de Jacmel y Carrefour.