El
excelente flautista y múltiple creador, cuya aportación ha sido
reconocida en importantes festivales del género, Orlando Valle
(Maraca), ha devenido descollante aglutinador de talentos, y gracias
a su bien ganado prestigio convocó a figuras de talla internacional
para la presentación de su Proyecto Maraca y the Monterey Latin Jazz
All Stars, la cual constituyó el primer gran acontecimiento musical
de este 2010 en nuestro país.
Conocido es que, nuestra Isla es un crisol de razas y culturas y
de esta mezcla han surgido numerosos ritmos que se han cruzado con
otros en los que han influido, especialmente en el jazz desde sus
inicios, pues en el ragtime es fácil percibir el bajo
"obstinado" de la habanera y cuando Chano Pozo con Dizzie Gillespie
introdujeron elementos afrocubanos en la modalidad del cubbop
(ejemplificado en la interpretación de su célebre obra Manteca,
todo un homenaje) y lo cual se mantiene en la actualidad.
Camerata en Guaguancó, del compositor Guido López–Gavilán,
quien bien conoce esta raigambre y la ha elevado al formato
sinfónico, abrió el concierto en la Sala García Lorca (Gran Teatro
de La Habana) y sirvió de buen preámbulo para mostrar la coordenada
que se propuso Maraca, la cual incluyó a insignes compositores
nuestros de los siglos XIX y XX, desde su perspectiva jazzística.
Referencia que creativamente también estuvo presente en Serenata
Cubana y Los 3 golpes, danzas de Ignacio Cervantes, todo
un adelantado para su época.
El Proyecto toma su nombre de Monterey (ciudad de California
donde se celebra el más antiguo festival de jazz de Estados Unidos y
donde surgió); y junto a su multifacético desempeño, Maraca tuvo la
virtud de dejarle el mayor protagonismo a sus invitados, quienes se
hicieron merecedores de cálidos aplausos y más de uno levantó al
público de sus asientos con los solos e improvisaciones que
caracterizan al jazz.
La enumeración hay que iniciarla, lógicamente, por los visitantes
procedentes de Estados Unidos, Canadá y Japón: Giovanni Hidalgo
(tumbadoras y set de percusión), nuestro Horacio (El Negro)
Hernández (batería), Hugh Fraser (trombón), David Sánchez (saxofón
tenor) y Sayaka (violín), la única fémina del grupo; y seguir con
los isleños: Harold López–Nussa (piano acústico), Julito Padrón
(trompeta, fliscornio), Feliciano Arango (bajo, contrabajo
acústico), Yusef Díaz (teclados) y Enrique Lasaga (güiro).
Además Maraca contó con un excelente apoyo en la Orquesta de
Cámara de La Habana, bajo la dirección del Maestro Iván del Prado,
quien no pudo esconder la alegría que lo embargaba ante el reto
enfrentado acertadamente y se la contagió a sus instrumentistas y
espectadores; y tuvo palabras de elogios para Lester Hamlet y Celine
Chauveau, los directores artísticos; los artistas plásticos Alain
Felipe Bauza y Nadia García y otros de sus colaboradores.
Cuando el programa cerró con Parque Central (lograda obra
del jazz latino que es expresión de la pertenencia de Maraca a la
ciudad y al país en que nació), no se podía más que reconocer que
habíamos disfrutado de tremendo concierto.
El próximo 23 de enero, según anunció el propio Maraca, será
protagonista de otro acontecimiento. Ha sido invitado a colaborar en
la actuación que ofrecerá el famoso cantante pop ruso Leonid Agustín
con su grupo, en la Plaza de la Catedral, y quien acaba de vender
diez millones de copias de su último CD. Como invitada especial
estará Omara Portuondo. El material que se filmará deberá concluir
en el Kremlin, en Moscú, "donde nosotros vamos a tocar, en calidad
de invitado especial, el 14 de febrero próximo", agregó.