Aún permanecen frescos en la memoria del Coronel Ángel Moreno
Urquiza los instantes cuando conoció al Comandante en Jefe Fidel
Castro el dos de enero de 1959, mientras hablaba a los soldados
batistianos en la región oriental de Cuba.
Desde ese momento tuve la suerte de compartir la alegría del
pueblo cuando llegábamos a las ciudades, entre ellos Sancti Spíritus
en la madrugada del seis de enero, recuerda el miembro de la columna
14 del Ejército Rebelde y uno de los espirituanos que participó en
la Caravana de la Victoria.
Las personas permanecían junto a los carros, querían saludar a
Fidel, y él conversaba con la gente, les contaba de las
transformaciones que impulsaría la Revolución, rememora Moreno
Urquiza a 51 años del recorrido de los barbudos.
Aquel seis de enero de 1959 en la Caravana de la Libertad estaba
también Alcibiades Aguilar Rondón, otro hijo de este terruño, quien
muy joven decidió luchar por la libertad y la justicia de los
cubanos.
Recuerdo que para poder entrar a la ciudad tuvimos que desviarnos
de la Carretera Central y acceder por la zona sur porque los puentes
de acceso a Sancti Spíritus estaban derrumbados, debido a las
batallas libradas entre las fuerzas rebeldes y el Ejército de
Fulgencio Batista.
Junto al coronel Angel Moreno Urquiza, Alcibiades Aguilar Rondón,
autoridades del partido y el gobierno, el pueblo espirituano recordó
hoy la llegada a esta ciudad de la Caravana de la Victoria,
encabezada por Fidel.
Pioneros, miembros de la Asociación de Combatientes de la
Revolución Cubana en Sancti Spíritus, y Oslay Bravo Bernal, primer
delegado directo del territorio al IX Congreso de la Unión de
Jóvenes Comunistas, reeditaron simbólicamente el recorrido de los
barbudos.