La ministra
ecuatoriana de Pueblos, Movimientos Sociales y Participación
Ciudadana, Doris Soliz, reiteró la apertura del Gobierno para
dialogar con todos los sectores de la sociedad, incluidos los
indígenas.
En entrevista con la televisión pública, Soliz señaló la voluntad
del Gobierno de "caminar con las organizaciones y, por eso dijo,
reiteramos el llamado al diálogo."
"Esperamos tener un diálogo directo con el presidente de la
Confederación de Pueblos Kichwa (Ecuarunari), porque creemos que hay
un sinnúmero de malos entendidos y un cruce entre la agenda social
indígena y la agenda política de varios dirigentes."
"Continuaremos empujando una férrea y sólida política respecto a
los principales intereses de las comunidades indígenas", añadió
Soliz y puso como ejemplo el Plan Tierra, educación y salud
intercultural, las circunscripciones indígenas, la plurinacionalidad
e interculturalidad.
Al Gobierno no le preocupan las movilizaciones, siempre que se
hagan en el marco pacífico y de la Constitución, precisó. "En torno
al tema del agua hay muchos actores involucrados, y en el Gobierno
tenemos la obligación de construir consenso con todos."
En ese camino "creemos haber hecho las cosas bien". "El 90 por
ciento de acuerdos en torno a la Ley de Aguas se construyó en las
mesas de diálogo desde el 5 de octubre, así que ese no es el
problema central", dijo Soliz.
"Confiamos, concluyó, en la sensibilidad que tienen las
organizaciones para comprender que éste es su Gobierno, que tenemos
interés en concretar la agenda indígena y que podemos caminar con
ellos."
"El movimiento indígena está compuesto por muchas más
organizaciones, Ecuarunari es una muy importante, pero están las
organizaciones y pueblos de la Amazonía y la costa, y para el
Gobierno es muy importante el criterio de todas y cada una de
ellas", enfatizó.