Flores oriundas de Jamaica florecerán en el Orquideario de Soroa,
Pinar del Río, mayor de su tipo en Cuba, que renueva sus colecciones
tras los embates de sucesivos huracanes.
Unas mil plantas de orquídeas junto a otras variedades
ornamentales, llegarán el año venidero al vergel, procedentes de la
vecina nación caribeña, declaró a Prensa Latina el director del
jardín, Luis Enrique Villalón.
Colombia y Sri Lanka, agregó, contribuirán también a incrementar
el patrimonio del centro científico con donaciones de ejemplares
típicos de esos países.
Comentó que los ofrecimientos surgieron tras los azotes de dos
meteoros en 2008, los cuales devastaron parte de la vegetación que
adornaba los ondulantes recintos expositivos.
Luego del paso de Gustav e Ike, los botánicos cubanos aunaron
esfuerzos para buscar y colectar orquídeas en toda la isla y
cultivarlas posteriormente en umbráculos a cielo abierto.
Hasta la fecha se han realizado exploraciones en la región
occidental y central del archipiélago, y actualmente trabajamos en
las provincias del oriente del país, precisó.
Villalón explicó que uno de los pilares de las labores de
conservación es el laboratorio de vitroplantas que funciona en Soroa
desde hace más de dos décadas para reproducir a gran escala especies
amenazadas.
Con un sólo fruto es posible obtener miles de plántulas, las que
son devueltas nuevamente a su medio natural.
El famoso orquideario (76 kilómetros al oeste de La Habana)
atesora unas 472 variedades de la dama del reino vegetal y otros
valiosos representantes de la flora nacional y mundial.