El pedido fue reiterado este lunes por el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, quien el pasado viernes se reunió aquí con el canciller marroquí, Taieb el Fassi Fihri, cuyo gobierno impidió el regreso de Haidar a su lugar de origen en el Sahara Occidental.

En conferencia de prensa en esta sede, la máxima autoridad de la ONU instó a Marruecos a mostrar una consideración especial hacia el problema de la defensora de los derechos humanos y expresó preocupación por el deterioro de su salud debido al prolongado ayuno.

Hay que encontrar una vía para detener la huelga de hambre, insistió al explicar que en su entrevista con el ministro marroquí solicitó a Rabat una postura positiva.

Haidar retornaba el pasado 14 de noviembre a El Aaiún, capital del Sahara Occidental ocupado por Marruecos, tras recibir un premio en Nueva York, pero las autoridades marroquíes le retiraron su pasaporte y la embarcaron por la fuerza en un avión de regreso a la isla de Lanzarote.

La mujer exige retornar a su lugar de residencia como ciudadana de la República Árabe Democrática Saharaui, sin aceptar la condición de nacional marroquí.

En declaraciones aquí el pasado viernes, el canciller de Marruecos declaró que su gobierno no aceptará las demandas de Haidar mientras la mujer mantenga su actual postura en defensa de su nacionalidad saharaui.

Para el ministro se trata de una conspiración antimarroquí y un asunto político y no humanitario.

El tema de Haidar estuvo presente este lunes en una entrevista sostenida en Washington entre el ministro de Asuntos Exteriores de España, Miguel Ángel Moratinos, y la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.