Unos 10 mil 200 campesinos y cooperativistas de Las Tunas están
integrados al movimiento de fincas agroecológicas, que se impulsa en
Cuba, para lograr una agricultura más productiva y sostenible.
La cifra representa el 65 por ciento de las más de 15 mil 600
fincas del sector privado existentes en los ocho municipios de la
provincia, 670 kilómetros al este de La Habana.
Dagoberto Molina, coordinador en el territorio del Proyecto
Agroecológico de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP),
dijo a la AIN que el programa se ejecuta en tres fases y tiene el
objetivo esencial de capacitar a los productores y extender la
práctica de la agricultura orgánica.
Precisó que entre los finqueros incorporados a la etapa inicial
del programa hay hasta la fecha más de cinco mil 400 en la
fase de tránsito y 80 fueron ya propuestos para obtener la condición
de "Finca Agroecológica", que es aprobada por la dirección nacional
de la ANAP.
Para alcanzar esa categoría, los productores deberán aplicar en
sus labores varios métodos agroecológicos, como la producción y
empleo del humus de lombriz y otros abonos orgánicos, protección de
suelos, uso de la tracción animal, conservación de semillas y
liberar sus terrenos del marabú, entre otras acciones.
En el impulso de este proyecto desempeñan un rol fundamental los
llamados facilitadores, que son campesinos o cooperativistas que
poseen condiciones para trasmitir las mejores experiencias de un
productor a otro.
Al respecto, Miguel Castro, destacado facilitador de la
cooperativa de producción agropecuaria Calixto Sarduy, del municipio
de Las Tunas, dijo a la AIN que la capacitación de los agricultores
y ganaderos es vital para elevar la productividad y contribuir a
proteger el medio ambiente.
"Hay muchos campesinos -opinó Miguel- que han usado
tradicionalmente abonos orgánicos y aplicado medidas para proteger
sus suelos o conservar semillas, sin saber incluso que son métodos
agroecológicos, pero siempre será mejor que conozcan la forma más
adecuada de hacerlo".