La Brigada Médica Cubana y de la Operación Milagro, en Suriname, emitió una declaración en saludo al Día de la Medicina Latinoamericana, que se celebra este jueves con motivo del natalicio del científico Carlos Finlay.

Que mejor homenaje a este día, que entregarnos con tesón, altruismo y amor a la noble profesión de salvar vidas, bajo el ejemplo de Martí, de Fidel y Raúl, expresa el texto.

Cuando a principios de la década de los 60, una brigada médica cubana prestó sus servicios solidarios al pueblo argelino, comenzaba una tradición internacionalista, que desde entonces caracteriza a nuestro personal de la salud, añade.

Expresa que ante desastres naturales, como terremotos y huracanes, en adversas topografías del orbe, y en inhóspitos rincones, donde jamás arribó médico alguno, la presencia de los galenos, enfermeras y técnicos cubanos ha llegado y continuará llegando.

La declaración destaca las actitudes éticas, generosas y revolucionarias que han protagonizado hombres y mujeres a lo largo de estos años de cooperación cubana en el mundo.

Agrega que no es posible hallar tesoro alguno que iguale o supere el valor de la esperanza, cuando los trabajadores de la salud le devuelven la sonrisa a un niño o a un adulto, un anciano recobra la visión o una gestante se convierte en madre de una criatura que la muerte no le pudo arrebatar.

También están aquellos, que en suelo patrio garantizan la atención a pacientes en zonas montañosas, laboran en el diario accionar de los Cuerpos de Guardia, salas de terapia, quirófanos, policlínicos, servicios de urgencia e instituciones científicas, en su noble misión de preservar el bienestar de la población.