Representantes de 79 familias recibieron hoy en actos en barrios
y comunidades de la provincia de Camagüey, la Medalla José Tey que
les otorgó el Consejo de Estado por prestar sus viviendas para aulas
de escuelas dañadas por los huracanes del 2008.
Pasamos los muebles y cuadros para otra habitación a fin de
despejar la sala de la casa para las mesas, las sillas y la pizarra
de clases, dijo a la AIN Mildred Graziadio, una de las condecoradas.
Ella junto a Mabel Martínez, su mamá, y los demás integrantes del
hogar, ubicado en la ciudad de Camagüey, apoyaron decididamente la
continuación del curso en septiembre del 2008, luego que los vientos
del huracán Ike dejaran sin techo a parte de la escuela primaria
José Ramón Sánchez.
Otras tres familias en la misma zona también brindaron sus
viviendas para que sirvieran de aulas de ese plantel hasta diciembre
del mismo año, cuando concluyó la reparación.
Fue una experiencia muy bonita que caló a los alumnos por el
desprendimiento de esas personas, expresó la maestra Yunieski
Jiménez.
Los municipios con mayor cantidad de casas utilizadas para
impartir clases fueron Guáimaro, Santa Cruz del Sur, Sibanicú y
Vertientes, informó Felina Alvarez, de la dirección provincial de
Educación, lugares donde los meteoros golpearon con más intensidad.
Además, en Camagüey 38 centros laborales merecieron un
certificado por acondicionar locales para la impartir clases ante
los efectos de los fenómenos atmosféricos.
En Cuba mil 744 representantes de núcleos que prestaron sus
hogares con ese propósito recibieron también este día la Medalla
José Tey, reconocimiento que toma el nombre de un joven mártir de la
Revolución que murió en combate contra la dictadura batistiana en
Santiago de Cuba hace hoy 53 años.