.— El canciller cubano,
Bruno Rodríguez, reclamó de la XIX Cumbre Iberoamericano un
pronunciamiento de rechazo a las elecciones en Honduras y alertó de
la amenaza para América Latina de la doctrina militar
estadounidense.
En Honduras se ha instalado, mediante un golpe militar, con la
instigación y el apoyo de los Estados Unidos, una dictadura, expresó
el jefe de la diplomacia de Cuba.
Reconocer el gobierno espurio que de estas elecciones ilegítimas
emerja -añadió- traicionaría los principios de paz, democracia y
justicia que se proclaman, y así debería manifestarse esta Cumbre.
Tenemos la profunda convicción de que el pueblo hondureño, con su
lucha, dirá la última palabra, manifestó Rodríguez ante el plenario
de la XIX Cumbre Iberoamericana, en el hotel Cascais Miragem.
En su intervención, el canciller cubano expresó que en pleno
siglo XXI, el gobierno de los Estados Unidos amenaza a los pueblos
latinoamericanos con el desarrollo de una doctrina militar agresiva,
la reactivación de la IV Flota y el establecimiento de bases
militares.
El propósito es la dominación y la intervención, es acercar el
poderío militar estadounidense a las ricas fuentes de materias
primas y recursos energéticos que posee la región, señaló.
Rodríguez dijo que constituyen una ofensa a la dignidad de
Nuestra América y una amenaza a la paz, la estabilidad y la
soberanía. Apuntan no sólo contra Venezuela, que tiene todo el
derecho de defenderse, sino contra todos los Estados de la región.
América Latina y el Caribe debe ser territorio libre de bases
militares extranjeras, agregó.
Cuba, país que ha sufrido y sufre en carne propia la persistente
hostilidad de los Estados Unidos de América, reclama el cierre de la
Base de Guantánamo, del campo de tortura allí instalado y la
devolución del territorio que usurpan a nuestro país, precisó.
América Latina y el Caribe debe ser también territorio libre del
terrorismo, manifestó el jefe de la diplomacia. Cuba, que ha sido
durante medio siglo víctima de dicho flagelo desde Estados Unidos,
reclama la liberación de cinco luchadores antiterroristas cubanos
presos injustamente en cárceles norteamericanas, por tratar de
impedir, con sus actos, que el terrorismo contra su Patria cobre
nuevas vidas cubanas e incluso norteamericanas, reiteró.
América Latina y el Caribe reclaman también el derecho de sus
pueblos a vivir en paz y a construir un futuro de justicia, en el
que la innovación y el conocimiento sean fuente de virtud, no
instrumentos de guerra, puntualizó el canciller. Esperamos que
nuestra meditación conjunta sobre estos temas, nuestra valoración
serena de la realidad en que vivimos y una acción resuelta,
contribuya al desarrollo equilibrado y sostenible de nuestros
pueblos, a facilitar el camino del conocimiento, la ciencia, la
tecnología y la innovación; y nos permita defender el derecho a la
paz y a la justicia, concluyó.