Con una Olimpiada del Saber en cada colectivo de primaria y
secundaria básica, los pioneros cubanos iniciaron hoy su homenaje a
quienes ejercen la noble profesión del magisterio, cercano ya el 22
de diciembre, Día del Educador.
Como todo 26, mes tras mes durante el curso escolar, los
monitores relevaron este jueves a sus maestros y profesores en las
aulas, y de esa manera comenzó la fiesta, que no desaprovechó
ocasión de aprender, incluso jugando y cantando.
En la capital del país, cientos de niños y adolescentes tomaron
en la tarde por asalto una de sus principales arterias, la Avenida
de los Presidentes, para convertirla en una gigantesca escuela al
aire libre.
Exposiciones de círculos de interés y de pioneros creadores,
encuentros de conocimientos, una miniferia del Libro, juegos al por
mayor y un festival deportivo, cultural y recreativo, permitieron a
los chicos mostrar al pueblo talento y conocimientos y agasajar a
sus mentores.
La voz popular advierte que "quien da primero da dos veces" y,
también, que "amor con amor se paga", y los pioneros empezaron
temprano y se proponen mantener esta "ventaja" en el gran homenaje
de la sociedad cubana y sus instituciones a los educadores.
Así las cosas, hasta el 22 de diciembre próximo "lloverán" las
iniciativas, entre las cuales se cuentan la visita a los hogares de
docentes ya jubilados y quienes cumplen misión internacionalista, y
a museos, monumentos y sitios que recuerdan la vida y la obra de
grandes del magisterio cubano.
Cartas, poemas, cuentos, dibujos, tarjetas de felicitación y
otros muchos obsequios, hechos con infinito amor por sus discípulos,
recibirán los educadores, y no faltará el reconocimiento y aliento a
los maestros y profesores jóvenes, muchos de ellos alejados de sus
familias, y también, claro está a los más destacados.