Los militares
estadounidenses vigilan un total de 800 satélites en condiciones de
maniobrabilidad dentro de un nuevo programa de seguimiento diario
sobre posibles colisiones espaciales, y esperan incorporar al
dispositivo otro medio millar de satélites no maniobrables antes de
finales de año, asegura Europa Press.
La fuerza aérea de Estados Unidos comenzó a perfeccionar su
capacidad de predecir posibles colisiones en el espacio después de
que un satélite ruso de comunicaciones fuera de uso colisionara con
un satélite comercial de comunicaciones estadounidense de la red
Iridium el pasado mes de febrero.
El general Kevin Chilton, responsable del Comando Estratégico de
los Estados Unidos, dijo que este hecho ha acabado con la idea de
que el espacio es tan grande como para considerar improbables
choques de naves, durante una conferencia celebrada en Omaha,
Nebraska.
En este sentido, han tratado de determinar la posibilidad de
colisiones, algo que ha resultado complejo ya que solo se estaban
siguiendo las trayectorias de un centenar de satélites al día.
Finalmente, el Comando Estratégico ha conseguido establecer
seguimiento de 800 satélites con capacidad de maniobra para poder
evitar colisiones.
Sin embargo, el censo total de satélites en activo ronda los 1
300, con el problema de que unos 500 no disponen de combustible
extra como para poder modificar su órbita si existiera riesgo de
colisión. En cualquier caso, su seguimiento estará fijado igualmente
para finales de año.