Con una evaluación del impacto del turismo sobre el patrimonio
local, concluyó hoy en Cienfuegos el IV Taller Nacional de Ciudades
Cubanas Patrimonio Cultural de la Humanidad.
En la última jornada, especialistas cienfuegueros y de Ciudad de
La Habana y Trinidad intercambiaron experiencias relacionadas con el
manejo de las áreas y la explotación turística.
Irán Millán Cuétara, director de la Oficina del Conservador de la
Ciudad en Cienfuegos, explicó que -aunque solo el centro histórico
de la urbe es patrimonial- existen 105 hectáreas de espacio
protegido en la zona urbana, las cuales también ameritan cuidados
especiales.
Resulta imprescindible mantener el equilibrio entre la modernidad
y los elementos tradicionales del entorno, siendo la única vía para
desarrollar un polo turístico competente y preservar los valores que
convirtieron a la ciudad en patrimonio mundial, aseguró el
arquitecto.
Nancy Benítez, miembro de la Oficina del Historiador de Trinidad,
comentó que es necesaria la interrelación entre todos los factores,
convirtiendo el aporte del turismo en un aliado para implementar
estrategias de conservación y evitar impactos nocivos en las
herencias tangibles e intangibles.
Cuba se mantiene como el país del Caribe con mayor cantidad de
sitios patrimoniales, incluidos siete culturales y dos localizados
en parques naturales.