.— El ministro de Defensa de
Colombia, Gabriel Silva, afirmó hoy en esta capital que su país y
Estados Unidos firmarán esta semana un acuerdo militar muy criticado
por diversos gobiernos por considerarlo una amenaza regional.
Es posible que la rúbrica sea este viernes, manifestó el
funcionario al ser interrogado por la prensa, al tiempo que
reconoció las legítimas inquietudes de las naciones vecinas por el
pacto.
Sin embargo, estimó que no tiene ninguna implicación geopolítica,
un criterio no compartido por varios países, entre ellos Venezuela y
Ecuador, cuyos gobiernos cuestionaron duramente el tratado al
señalar que apunta hacia ellos.
Mediante el pacto Bogotá cederá siete bases militares al
Pentágono durante una década y permitirá a las tropas
norteamericanas actuar en suelo colombiano y les otorgará inmunidad.
El caso provocó una reciente cumbre extraordinaria en Argentina
de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) para discutir el
texto.
Como parte de su visita, Silva se entrevistó la víspera con su
homólogo estadounidense, Robert Gates, y con la directora interina
de la Dirección Estadounidense Antidrogas, Michelle Leonhart.
Este martes visitará el Comando de Operaciones Especiales y el
Comando Sur de Estados Unidos, en Florida.
El Congreso norteamericano aprobó la pasada semana el proyecto de
presupuesto de Defensa, que destina 46 millones de dólares para la
estratégica base colombiana de Palanquero, a unos 180 kilómetros al
oeste de Bogotá.
Paralelamente, el canciller de Colombia, Jaime Bermúdez, afirmó
que el gobierno podría materializar el polémico acuerdo militar sin
necesidad de enviarlo al legislativo.