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La organización fundamentalista Estado Islámico de Iraq se adjudicó
la autoría de dos atentados terroristas que el domingo causaron 155
muertos y unos 500 heridos en esta capital, según fuentes de ese
grupo.
Un mensaje colocado en Internet y atribuido a la agrupación que
reconoce tener vínculos con la red Al-Qaeda señaló que las Falanges
de la Unicidad se lanzaron, una vez más, sobre Bagdad contra los
bastiones de la infidelidad y los pilares del Estado apóstata.
Según la nota, el Estado Islámico de Iraq decidió atacar el
Ministerio de la Opresión y la Tiranía, llamado Ministerio de
Justicia, y el Consejo Provincial de Bagdad, llamado Consejo Legal
del Gobierno Local de Bagdad.
Añadió que la agresión del domingo, la más mortífera de los
últimos dos años en este país, apenas abre la segunda fase de lo que
describe como el plan de la cosecha del bien.
Hace dos días, dos carros-bomba estacionados cerca de los
edificios del Ministerio de Justicia y del gobierno provincial de
Bagdad, en el barrio Al-Salehiya situado en la llamada Zona Verde,
estallaron y causaron numerosas víctimas, además de cuantiosos daños
materiales.
La acción superó en número de muertes al atentado del 19 de
agosto contra dos ministerios en esta misma capital, con saldo de
100 bajas fatales y unos mil 200 heridos, por los cuales Iraq acusó
a Siria de estar involucrado en ese incidente. Damasco rechazó la
imputación.
El canciller iraquí, Hozhiyar Zebari, acusó el lunes a los países
vecinos de incumplir los compromisos asumidos recientemente en la
ciudad egipcia de Sharm El-Sheikh por sus respectivos ministros del
Interior para contribuir a la estabilidad y seguridad de Iraq.
A su vez, el jefe de gobierno, Nouri Al-Maliki, afirmó que los
atentados fueron instigados por deseos políticos y la maldad de
enemigos de su nación.
El Estado Islámico de Iraq, surgido en 2006 y que reivindicó los
bombazos de agosto en Bagdad, está integrado por ocho milicias
armadas que alegan combatir por el establecimiento de un gobierno
fundamentalista alejado de la influencia política occidental.