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Como en el refrán del cántaro y la fuente, el bloqueo de Estados
Unidos contra Cuba deberá recibir mañana, por décimo octavo año
consecutivo, una nueva y amplia condena de la Asamblea General de
Naciones Unidas.
Fue el 24 noviembre de 1992 cuando la 47 sesión ordinaria del
máximo órgano de la ONU aprobó por 59 votos a favor, tres en contra
y 71 abstenciones una primera resolución de repudio a ese asedio,
rechazo que en 2008 fue casi unánime, con un balance de 185-3-2.
El análisis de ese tema está programado para este miércoles como
el punto 19 de la agenda de los debates y bajo el titulo de
Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero
impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba.
La Asamblea votará un proyecto de resolución que reitera la
exhortación a todos los Estados a abstenerse de promulgar y aplicar
leyes y medidas de esa clase en cumplimiento de la Carta de la ONU y
del derecho internacional, instrumentos que reafirman la libertad de
comercio y navegación.
Asimismo, advierte que continúa la promulgación y aplicación de
nuevas normas dirigidas a reforzar y ampliar el bloqueo y expresa
preocupación por los efectos negativos de esas disposiciones sobre
la población cubana y los nacionales de Cuba residentes en otros
países.
El texto reitera su llamamiento a los Estados en los que existen
y se aplican esas regulaciones a que, en el plazo más breve posible
y de acuerdo con su ordenamiento jurídico, tomen las medidas
necesarias para derogarlas o dejarlas sin efecto.
Igualmente, incluye un nuevo análisis del tema en el programa
provisional de su sexagésimo quinto período de sesiones, el próximo
año.
En su parte inicial, el proyecto contra el bloqueo reafirma,
entre otros, los principios de igualdad soberana de los Estados, la
no intervención y no injerencia en sus asuntos internos y la
libertad de comercio y navegación internacionales.
También recuerda declaraciones de las cumbres iberoamericanas
relativas a la necesidad de eliminar la aplicación unilateral de
medidas de carácter económico y comercial contra otro Estado que
afecten al libre desarrollo del comercio internacional.
Expresa preocupación ante la promulgación y aplicación de leyes y
disposiciones como la llamada Helms-Burton, cuyos efectos
extraterritoriales afectan a la soberanía de otros Estados, los
intereses legítimos de entidades o personas y la libertad de
comercio y navegación.
Al respecto, hace mención a las 17 resoluciones aprobadas por la
Asamblea General cada año desde 1992 a 2008 y a las declaraciones y
acuerdos de foros intergubernamentales, órganos y gobiernos en
rechazo a la promulgación y aplicación de medidas de ese tipo.
La votación de mañana será la primera con Barack Obama en la
presidencia de Estados Unidos, bajo cuyo mandato nada ha cambiado
con respecto al bloqueo, según sostiene el gobierno cubano con
argumentos irrebatibles.
Un informe presentado por La Habana sobre el tema apunta que nada
esencial ha cambiado desde la llegada al poder del nuevo gobierno
estadounidense en enero de 2009.
El documento dice que las autoridades norteamericanas
incumplieron de manera absoluta la resolución adoptada hace un año
por el máximo órgano de la ONU para el cese del bloqueo.
El texto denuncia a la Casa Blanca por mantener en vigor las
leyes, disposiciones y prácticas que le sirven de sustento al cerco
y la acusa de continuar reforzando los mecanismos políticos,
administrativos y represivos para su instrumentación más eficaz y
deliberada.
El actual gobierno de Estados Unidos ha continuado aplicando el
bloqueo contra Cuba con todo rigor, subraya el informe al destacar
la falta de acciones para desmontar el entramado de leyes y
disposiciones administrativas que conforman las bases legales y las
regulaciones del hostigamiento a la isla.
Añade que el asedio contra Cuba no es una cuestión bilateral
entre la isla y su vecino del norte, pues la aplicación
extraterritorial de las leyes norteamericanas y la persecución
contra empresas y ciudadanos de terceros países afectan la soberanía
de muchos otros Estados.
Y la inmensa mayoría de esos Estados volverán a llevar el cántaro
del bloqueo a la fuente del repudio universal hasta que se rompa.