A
partir de un concurso de guiones lanzado hace unos años por los
Estudios de Animación del ICAIC, Bárbaro Joel Ortiz comenzó a gestar
Veinte años, película que será estrenada el próximo lunes 19
en la sala Chaplin y a partir del 22 en todo el país.
Se trata de un singular proyecto destinado al público adulto.
Hace varios años que en Cuba no se realizaba un material de más de
diez minutos con similares características al laureado Papobo,
de Hugo Alea, que también empleó la técnica de animación stop
motion, consistente en aparentar el movimiento de objetos
estáticos mediante el empate de secuencias fotográficas.
El título de esta fábula costumbrista guarda relación con el
conocido tema Veinte años, de María Teresa Vera, y narra las
peripecias de una mujer en su empeño de lograr la atención de su
marido tras veinte años de desgaste.
Con producción de Alex Cabañas y la cooperación de Paul Chaviano
en el diseño escenográfico, esta animación cuenta con dirección,
guión y fotografía de Ortiz, quien se autodefine como un creador
"atrevido por realizar todo esto por pura intuición".
"La historia —precisó— se desarrolla solamente con imágenes, no
hay diálogos por lo que se ha trabajado con mucho rigor en la
concepción de la escenografía, en la dirección de arte, el diseño y
la animación como tal. El lenguaje es realista, aunque como sabemos
las obras de arte no reproducen la naturaleza sino que le dan
expresión".
Dentro de esta concepción, la música ocupa un papel protagónico.
En la banda sonora a cargo de Harold López Nussa se incluye la
canción Veinte años de María Teresa Vera, por una de sus
mejores intérpretes, Omara Portuondo.
Ortiz valoró el aliento recibido por Walter Tournier, destacada
personalidad de la animación uruguaya, quien apoyó y confió en el
proyecto desde el primer momento, al igual que el maestro Juan
Padrón, quien asesoró el proceso creativo. (C.C.G.)