Más de 23 millones de habitantes
de los países del Cuerno de África podrían ser víctimas de las
severas condiciones climatológicas generadas por el fenómeno El
Niño, de acuerdo con un reporte difundido hoy por organizaciones de
la ONU.
En lo fundamental serán personas cuyo medio de vida principal es
la agricultura o la ganadería, y los desplazados internos y
refugiados.
Los países del llamado Cuerno de África: Somalia, Etiopía,
Eritrea, Dijibuoti y los cercanos Kenia, Tanzania y Uganda han
enfrentado hasta el momento una larga sequía de 10 años, más grave
en los últimos cuatro.
Los expertos y organismos humanitarios habían alertado sobre la
situación de emergencia alimentaria y sanitaria que se creará a
partir de ahora, a consecuencia de las lluvias muy fuertes asociadas
a El Niño, un evento climático bastante errático, pero muy intenso.
Según estimados de UNICEF, en 2009 unos 500 mil niños menores de
cinco años podrían morir en la región, víctimas de la malnutrición y
el hambre.
Al menos unas 750 mil personas podrían resultar dañadas por las
inundaciones en Kenia, entre los que figurarían 150 mil refugiados
que tendrían que ubicarse en zonas más altas.
Por su parte, se calcula que en Somalia cerca de 450 mil personas
están en peligro en las regiones de Juba y Shabelle, al igual que
unos 25 mil ugandeses.
El reporte de la ONU precisa que la sequía sigue siendo el
principal problema del Cuerno de África, pero el fenómeno de El Niño
lo puede agravar, pues las lluvias e inundaciones harán que se
pierdan más cosechas y haya rebrotes de letales enfermedades como el
cólera.
Esta situación de emergencia alimentaria no deberá mejorar hasta
comienzos de 2010, en la próxima temporada de cosechas, estiman los
expertos.