El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) destacó hoy
en esta capital la manera en que Cuba protege a sus niños, quienes
muestran índices de desarrollo similares a los de países del Primer
Mundo.
En la presentación del nuevo informe "Progreso para la Infancia:
un balance sobre la protección de la niñez", José Juan Ortiz,
representante de esa organización en la Isla, expresó que la
responsable por estos logros es la voluntad política del Gobierno de
la nación caribeña.
Ahondó en que, a pesar del bloqueo de EE.UU. durante casi medio
siglo y de las limitaciones propias de un país subdesarrollado, en
Cuba se destinan los recursos para asegurar la salud, la educación y
otros derechos de los pequeños.
Mientras la Isla garantiza que la totalidad de los recién nacidos
cuenten con identidad legal, carecen de ella cerca de 51 millones de
infantes del orbe nacidos en 2007, contrastó.
Esa estadística, conjuntamente con otras, se presentan por
primera vez en este tipo de informes.
Al compartir la presentación del documento con Mariela Castro
Espín, directora de Centro Nacional de Educación Sexual, el
funcionario calificó a la legislación cubana como una de las más
claras en despenalización del niño, los que -amparados por esa ley-
no comenten delitos, sino hechos tipificados como tal.
En discordancia con el panorama de la Isla, más de un millón de
pequeños están detenidos por los sistemas de justicia en el mundo,
indican cifras conservadoras, y desde enero de 2005 hasta la fecha
cinco países han aplicado la pena de muerte a infantes.
Recordó que en la Isla, luego de los desastres provocados por
huracanes en 2008, se aseguró la continuidad de las clases, lo cual
demuestra la prioridad que el Estado cubano concede a la infancia.
Más de mil millones de niños en el orbe viven en países o
territorios afectados por conflictos armados, de ellos cerca de 300
millones son menores de cinco años, revela el documento.
Con la presentación de este informe, la UNICEF llama a la acción
a todos los gobiernos para crear un entorno protector a la infancia,
el cual insta, entre otras acciones, a la promoción de la
participación de los niños y su autonomía.
Al respecto, Ortiz significó el papel de la Organización de
Pioneros José Martí, a través de la cual los infantes cubanos tienen
la posibilidad de expresarse, incluso reunidos en congreso.
La publicación posee un carácter especial en esta ocasión, por
coincidir con el aniversario 20 de la existencia de la Convención
sobre los Derechos del Niño, firmada por más de 190 países. Una de
las pocas naciones que no ha suscrito el documento es Estados
Unidos.