La Convención Internacional Ordenamiento Territorial y Urbanismo,
que sesiona en esta capital, analiza en mesas de trabajo el papel de
la planificación física en el proceso de inversión de las
administraciones locales.
Entre las experiencias expuestas en la cita, que sesionará hasta
el próximo viernes, destacan el impacto socioeconómico de las
migraciones hacia el territorio habanero, y la organización del
sistema de asentamientos humanos en la provincia de Guantánamo.
Oscar Renté, especialista de la Dirección Provincial de
Planificación de la provincia de La Habana, señaló que los
movimientos migratorios, fundamentalmente provenientes del Oriente
cubano, repercuten en aspectos del territorio habanero, el de mayor
tasa anual de crecimiento de Cuba.
Este fenómeno-significó- contribuye a reducir el índice de
envejecimiento de la población ya que el 73 por ciento de los
inmigrantes se encuentra en el rango de cero a 59 años, lo que
garantiza el reemplazo laboral y el completo de la fuerza, sobre
todo en la agricultura y la construcción.
El especialista también refirió que el estudio dota al gobierno
de herramientas para dirigir el necesario proceso de inversión
porque el incremento de las migraciones hacia La Habana amenaza la
prestación de servicios básicos a la población (salud, transporte y
otros).
También se discutió sobre la distribución territorial de la
población en Guantánamo y las propuestas del sistema de
planificación en la más oriental de las provincias para mejorar las
condiciones de vida, en una zona difícil ya que el 75 por ciento de
su espacio físico es montañoso.
La arquitecta guantanamera María Elena Ming explicó las políticas
de desarrollo del sistema de asentamientos humanos de su territorio,
"que necesita elevar la protección ambiental, la prestación de los
servicios básicos, para crear una identificación con la zona y
paralizar el éxodo", apuntó.