El terrorista de origen cubano Rodolfo Frómeta, del grupo
paramilitar Comando F-4, se puso al servicio del presidente golpista
de Honduras Roberto Micheletti para sacar provecho de la situación
en ese país.
El sitio
CubaDebate reproduce este viernes una entrevista del diario
hondureño El Tiempo a este mercenario, "luchador" caricaturesco,
enfundado en un uniforme de camuflaje con estrella de comandante
"ganada" en el fragor de las colectas de dinero en tiempos de
carnavales en Miami.
"El es el jefe de los comandos F-4 que han puesto en marcha la
"Operación Libertad" dirigida a apoyar con armas de gran alcance y
si es necesario hasta con recursos financieros al actual gobierno,
si lo requiere", dice El Tiempo.
Frómeta, quien llegó a Honduras, felicitó a las Fuerzas Armadas
de esa nación por decirle a Hugo Chávez, presidente de Venezuela,
"hasta aquí llegó el comunismo en Latinoamérica".
Le expresó a Micheletti que no se preocupe si le cortan el
combustible, que con solo hacerle una señal está dispuesto a tocar
importantes teclas en Miami para que las petroleras bañen de
carburantes todo Honduras en un abrir y cerrar de ojos, sin ningún
costo adicional.
Dijo que posee un eficaz cuerpo de inteligencia, cuyos agentes
están infiltrados en los ejércitos de Chávez, Evo Morales, Daniel
Ortega y Rafael Correa.
Incluso, añadió que tiene el suficiente poder entre congresistas
y senadores de Estados Unidos a fin de hacer que Barack Obama apoye
el gobierno de Micheletti.